La piquiña de los 7 años: Gracias por acompañarnos en estos 7 años kilométricos

¡HOY CUMPLIMOS 7 AÑOS!

Queremos compartirlo con ustedes, la gente que siempre nos acompaña y nos respalda. Dicen que el 7mo año siempre “pica”. Conoce aquí las 7 piquiñas de estos 7 años:

1- La piquiña de cuestionarlo todo.

En KmO, tenemos muchas y valiosas preguntas. Para comprender la violencia de Estado en Puerto Rico a profundidad, hemos luchado durante años para acceder a datos oficiales y poder centrar nuestras respuestas en evidencia, en hechos. Nuestros análisis estadísticos documentan patrones de violencia y opresión policial en Puerto Rico y han abarcado desde la perspectiva racial en las víctimas fatales de la Policía hasta la alta frecuencia de los feminicidios perpetrados por oficiales de la Uniformada. Km0 monitorea la violencia policial, documenta casos y apoya a las víctimas y sus familias en la búsqueda de justicia.

2 - La piquiña de conectarnos y trabajar en conjunto.

Sabemos que contrarrestar  las lógicas policiales y autoritarias y confrontar  la violencia de Estado es un trabajo arduo pero más urgente que nunca. Por eso creemos en las alianzas entre organizaciones y comunidades que permitan organizar nuestra fuerza colectiva contra aquello que amenaza nuestros derechos, nuestros recursos y nuestro buen vivir. Nos toca construir otra seguridad pública que ponga a la gente y sus comunidades primero; que defienda la justicia social y priorice en la equidad y la prevención en lugar del castigo, la violencia y en encarcelamiento.

3 - La piquiña de nombrar lo que no tiene nombre.

Perder un hijo por la violencia policial no tiene nombre. Pero hasta eso hay que nombrarlo. Por eso lanzamos una serie de historias de maternidades en duelo llamada ‘No tiene nombre’. En esta serie, cinco  mujeres que son madres y que perdieron a sus seres amados a manos de la violencia policial narran su experiencia y denuncian la inacción del Estado y la impunidad de la Policía.

4 - La piquiña de imaginar nuevas formas de justicia.

Es a través de los casos que documentamos y las historias que contamos, que podemos ver con claridad que el sistema de castigo y cárcel es uno cruel, obsoleto y no resuelve ni transforma los problemas de nuestro país. Aspiramos a otras formas de justicia desde una mirada transformativa, que rompa con el legado perverso de vigilancia, castigo y represión sobre el que hemos cimentado nuestro país.

5 - La piquiña de cambios y transformaciones estructurales.

Impulsamos la imaginación y construcción de nuevas formas de justicia, a través de la mediación de conflictos y la justicia transformativa.

Por ejemplo, la evidencia nos revela que las personas que sufren crisis emocionales y de salud mental, son maltratadas y violentadas por la Policía en sus intervenciones y demasiadas veces terminan en la cárcel en lugar de recibir la atención que necesitan. Desde la campaña Manejo de crisis sin policías, exigimos y trabajamos para que no sea la Policía la que intervenga en crisis emocionales pues su participación escala la violencia, provoca daño, y trauma y puede ser letal. Promovemos que sea un grupo de personal salubrista y sensible el que intervenga en estos casos para que la historia sea otra.  

6 - La piquiña de construir nuevas narrativas.

Nuestra base de datos evidencialaviolencia.org es un archivo de historias sobre diversas experiencias de violencia policial. Este proyecto de documentación es una herramienta poderosa de participación ciudadana, búsqueda de rendición de cuentas y de abogacía pública contra la violencia de Estado.

Creemos en el poder de contar nuestras historias, para transformar las narrativas que legitiman la violencia. Para nuestra colaboración de formación de liderazgo juvenil en el Residencial Manuel A. Pérez utilizamos música, podcast, talleres de arte callejero y otras formas de educación popular para que la juventud de nuestras comunidades también cuenten sus historias.

7 - La piquiña de cuidarnos y crear condiciones de buen vivir.

Sabemos que lo que hacemos no es fácil, por eso creemos en cuidar nuestra salud mental y física a través de la práctica del autocuidado radical para seguir agitando y transformando las nociones de seguridad pública.

Gracias por acompañarnos en estos 7 años kilométricos.

Nuestra organización no recibe fondos públicos y, ante la incertidumbre de estos tiempos, hoy más que nunca requerimos la solidaridad de quienes nos apoyan y pueden aportar económicamente.

QUE LA PIQUIÑA DE CUESTIONARLO TODO Y CREAR NARRATIVAS COLECTIVAS PARA LA VIDA NOS LLEVE A AGITAR Y TRANSFORMAR NUESTRO PAÍS.