¿Viste nuestro FB Live Café ☕️ 'Toque de queda, democracia y DDHH: ¿Qué nos queda?'
En estos tiempos extraños y difíciles de pandemia, restricciones extremas, autoritarismo y corrupción, es aún más importante hablar sobre democracia, derechos humanos y el ejercicio de protestar para vivir. Te invitamos a que veas nuestro Facebook Live Café 'Toque de queda, democracia y derechos humanos: ¿Qué nos queda?’, con las profesoras Annette Martínez y Yanira Reyes.
También puedes leer el resumen que nos hizo Zumbadorcito a continuación:
Resumen del Live:
El sentido del toque de queda es el no contagio, pero toda reglamentación y legislación en Puerto Rico está por debajo de la Constitución. La Constitución establece claramente el derecho a la libre expresión (protesta), el derecho de movimiento, el derecho de libre asociación, el derecho a la privacidad, entre otros de la vida digna.
La Policía, el Estado, habla como si la Constitución fuera algo que aplica a veces: La Constitución es hasta las 11:00 p.m., Verano del 19, “Si quieres defender tu Constitución, defiéndela en los tribunales”, arresto a Giovanni Roberto de Comedores Sociales de Puerto Rico, 30 de abril de 2020, día de este Live Café de Kilómetro 0 entre Mari Mari Narváez, moderadora y directora ejecutiva de Kilómetro 0, la profesora Yanira Reyes, experta en Derecho Constitucional y la profesora Annette Martínez, fundadora del Instituto Caribeño de Derechos Humanos.
La Constitución es siempre vigente, se logró con historia de lucha y existe para defender a las personas y defenderlas de la Policía, del Estado. El Estado tiene la obligación de trabajar sin faltar a y sin violentar los derechos fundamentales de las personas establecidos en la Constitución, y más allá de nuestras costas, la Normativa Internacional de Derechos Humanos obliga a todos los Estados a lo mismo.
El arresto de Giovanni fue inconstitucional (atentó contra su derecho de protesta, de movilidad y de libertad), fue discriminatorio contra quienes protestan y son activistas, haciéndoles pasar como si fueran criminales ante la sociedad cuando son exactamente lo contrario, creó posibles contagios COVIT-19 y fue mal de facto (mascarilla por debajo de nariz, no guantes, no hay rastreo sistemático). La Policía entonces, por las cámaras de la prensa miente a la sociedad sobre lo que está en la orden ejecutiva nula (las tumba coco). Se inventa cosas y en el cuartel no responde a la pregunta de los abogados y las abogadas de Giovanni, por qué lo encarcelan.
Mientras el Gobierno de Puerto Rico busca controlar la población para que no manifieste objeción en su contra y para que no ejerza su derecho a la protesta, metiendo miedo (quién quiere ser esposado y estar 9 horas en una celda) y criminalizando héroes, la Normativa Internacional de Derechos Humanos provee protección más amplia a manifestantes, a los y las que defienden derechos, a activistas, siendo más restringido para los Estados los casos sumamente específicos en que pueden limitar un derecho humano.
Pero en Puerto Rico vemos estos patrones de control para que las personas no ejerzan su objeción y exigencia al Estado todo el tiempo. Los toques de queda después de María mientras se cometía negligencia criminal, recuerda Yanira. Los terremotos, la corrupción y la ganancia siempre antes que el bienestar de Puerto Rico. Ahora fue necesaria la protesta de presión pública y una demanda para que el Estado abriera los comedores escolares, se ven vistas por corrupción en la compra de pruebas, se reabre la economía sin garantías de seguridad ante la pandemia COVIT-19 y no es nuevo, todos los años el Gobierno de Puerto Rico, días antes del 1ero de mayo, lleva a cabo una campaña de miedo acompañada del cierre de calles, espacio de manifestación, en que se ve a quien protege, a la banca de Puerto Rico. No hablan del distanciamiento físico, no recalcan medidas de prevención de contagio para la celebración del Día Internacional de los y las Trabajadores, amenazan y cierran la Milla de Oro.
Otros Estados también mal utilizan el estado de emergencia COVIT-19 para controlar, meterse en las vidas de las personas y abusar del poder. Lo que no se repite en otros Estados pasa solo aquí: los arrestos. Más de 700 durante la cuarentena, una cantidad exagerada. ¿Cuántos habrán resultado en acusaciones?, se pregunta Annette y recuerda que en una intervención es el o la policía en función del Estado quien tiene que explicar por qué interviene, no es la persona quien tiene que explicar nada. Al momento del Live Café las entrevistas realizadas por Kilómetro 0 a personas intervenidas durante este periodo de emergencia no han demostrado justificación alguna para la intervención (agresiva) de la Policía. Los arrestos crean más contagios, los y las policías están 27 veces más contagiados que el resto de la población, recuerda Mari Mari que Kilómetro 0 ha dicho y reportado.
La emergencia no justifica la violencia contra nuestros derechos fundamentales a ningún nivel, arresto o intromisión a nuestras vidas, venga de personas, de comercios o del Estado: a dónde vamos, con quienes nos relacionamos durante la pandemia, no pueden tomarnos la temperatura sin nuestro consentimiento, no pueden echarnos alcohol sin avisarnos.
Diariamente en Puerto Rico vivimos violencia y negligencia de derechos humanos contra niños, mayores, mujeres, contra todos, y cuando el Estado mata a personas con las que interviene casi siempre son personas pobres, negras o con la salud mental comprometida. Contra esto trabajamos, contra esto trabajan las presentes en este Live Café obligatorio, y dan gracias a los y las que protestan.
¿Qué nos queda? Protestar.
Zumbadorcito Resume
@SaadéYordán